Sin previo aviso ni explicación posterior. "Su número de teléfono no
está autorizado a usar nuestro servicio" respondía el móvil de Óscar
cuando trataba de acceder a Whatsapp. No sabía por qué motivo, pero
había sido expulsado del servicio de mensajería instantánea más popular
del mundo. "Mi vida social se limitó muchísimo", confiesa. No es para
menos si se tiene en cuenta que esta es la aplicación utilizada por el
96% de los españoles como principal vía de comunicación.
Óscar no tuvo ocasión de defenderse, tampoco recibió justificación
alguna por la que ahora era 'persona non grata'. Durante semanas envió
infinidad de correos a la compañía, respondidos tarde y de forma
automática por un robot. Finalmente, a través de LinkedIn, consiguió
contactar con el único trabajador español de la marca. A modo de favor,
le desveló el motivo de su expulsión: había sido bloqueado por más de 20
usuarios.
Ser "un infractor reincidente" o molesto
es solo una de las razones por las que uno se puede ver fuera del
servicio. Los 'términos y condiciones de uso' es un documento que, por
norma casi general, no suele leer ningún usuario, pero que a la larga
puede pasar factura. A Rosa también se le denegó el acceso al crear
varios grupos para publicitar su nueva tienda. Lo mismo le sucedió a
Miguel cuando una noche se pasó de la raya chateando con amigos. E igual
suerte corrió Carlos, que se ahorró el dinero en invitaciones de boda
gracias al teléfono móvil. Todos ellos fueron acusados de 'spam' o confundidos con un robot, dos prácticas prohibidas en el contrato con Whatsapp.
El largo listado de normas incluye una cláusula por la que la
compañía puede proceder a la expulsión en cualquier momento... Y no está
obligada a avisar ni a dar motivos. Si uno se detiene a leer el
contrato, se encontrará con que el servicio solo está disponible para uso personal, no comercial. Obviamente, no se permite la suplantación de identidad, como tampoco publicar falsedades "que pudieran dañar a Whatsapp". Y si se intenta obtener acceso no autorizado a la aplicación, a sus sistemas o a sus redes también se procederá a la suspensión de la cuenta.
En cuanto al contenido, se prohíbe difundir material "ilegal, obsceno, difamatorio, calumnioso, amenazante,
acosador, odioso, racista o étnicamente ofensivo, o que alienten a una
conducta que pueda ser considerada una ofensa criminal, dar lugar a
responsabilidad civil, viole alguna ley, o sea de otro modo
inapropiada". Lo mismo con el material para adultos cuando no se identificada como tal, con los archivos con derechos de autor -"a menos que usted sea el propietario o tenga permiso de su legítimo propietario"- o lo que contengan virus.
Fuente: elcorreo.com
Cambia el titulo, sin darte cuenta has escrito WHATSAT en lugar de Whatsapp.
ResponderEliminarSaludos.
Gracias por la apreciación. Ya está cambiado. Saludos.
ResponderEliminar